Me encantaría leerla con la madurez de este momento, esas cartas que me escribiste en la desesperación de no saber como comunicarte con tu hijo, en esas cartas que desesperadamente pedías un acercamiento con este hijo que solo supo darte reproches, esas cartas que encarecidamente pedías que no te viera como un papa sino como un amigo.
Papa, añoro volver a leer esas cartas y volver a leer entre lineas, volver a recordar que lo que querías era que fuera buen muchacho, que no desperdiciara mi vida, pero sabes que? Quiero LEER entre lineas, añoro tus consejos de verdad con la desesperación de que tenias un hijo que le entraba por un oído y le salía por el otro.
Este hijo tuyo, que también esta desesperado por platicar con su propio hijo, papa, me acuerdo tanto que me decías que de pequeño yo era el que estaba mas cerca de ti y que me llevabas para todos lados, que paso con ese puberto malcriado!?!? En que momento desperdicie mi vida sin estar tan cerca de ti, en que momento me dedique a solo verte el lado negativo y culparte por la vida que lleve!!??
Me quede tranquilo cuando en aquellos entonces te dije cosas de reclamo, porque las exteriorice, pero me quedo muy intranquilo por no haberte pedido un consejo y aceptarlo a pesar de tus defectos y errores.
Perdona de corazón mi estúpida manera de pensar y de huir de las cosas importantes, disculpa por todo lo duro que llegue a ser contigo.
Gracias a Dios aun puedo decírtelo en vida, de verdad perdóname TU, que yo no tengo NADA que perdonarte a ti.
Solo eso, solo quería decirte que me arrepiento de no tener tus cartas aquí conmigo, esas cartas de desesperación por comunicarte con tu hijo, este que te ama,
Este imperfecto que...
Ahora es Papa.
Te Amo,
Tu Hijo Gabo
